Una cordillera montañosa realmente magnífica, Maganik se asemeja literalmente a cuchillas de afeitar talladas en la piedra. La naturaleza de la zona es increíblemente salvaje y no hay ningún pueblo ni carretera que perturbe la vida rural del entorno. En el corazón de este encantador paisaje se enuentran algunas de las montañas más inaccesibles de Montenegro, como el monte Međeđi (el "oso"), sin duda la ascensión más difícil del país a pesar de su relativamente moderada altura (tan sólo 2.139 metros).
Alrededor de la cordillera montañosa circula el río Mrtvica que ha tallado cañones magníficos y vertiginosos en la roca. Tan profundo e infranqueable que refuerza la leyenda de impenetrabilidad de la montaña. En todo caso, es un paraíso para los aficionados a los deportes de aguas blancas durante un recorrido.