Situado tras una muralla con forma de estrella de 12 puntas, Almeida es un bonito pueblo clasificado como patrimonio histórico. Esta fortaleza cercana a la frontera española data de los siglos XVII y XVIII, y se encuentra en un sorprendente buen estado de conservación.
Aconsejo:
Almeida parece muy apartada viniendo desde Oporto o Lisboa Pero la Beira Alta merece hacer una excursión que pase por Almeida. Podrás alojarte una noche en una pensión en el centro del pueblo o por sus alrededores.
Mi opinión
No tuve ocasión de descubrir Almeida desde lo alto: parece ser que las fortificaciones componen una estrella de 12 puntas perfectamente regular... Al llegar a las Portas de São Francisco desde la zona moderna de Almeida, pude no obstante comprobar un detalle de la función defensiva de este monumento: su puerta fortificada es a la vez disuasoria y austera. ¡Los fosos, espesas murallas, obstáculos, puertas falsas y túneles abovedados te darán una idea del ingenio que se requiere para tratar de asaltar un lugar semejante! Al descubrir las prisiones subterráneas me dije que sería mucho más prudente visitar este lugar ahora que solo alberga a unos pocos militares, los cuales se hospedan en el Quartel de Estradas, no lejos de las Portas de São Francisco.
Fue una experiencia agradable e impresionante el recorrer las callejuelas que bordean las bonitas casas blancas, así como explorar los almacenes, cuarteles y murallas. Sin embargo, pienso que no comprendí del todo el interés estratégico de Almeida hasta que me enteré del hecho de que el castillo fortificado que dominaba el fuerte desapareció por completo tras una explosión acontecida durante el asedio de Almeida en 1810, ¡protagonizada por el ejército napoleónico! No te puedes perder visitar este lugar en medio de tu viaje a través de Portugal…
