Me encantó bucear sobre el arrecife de coral que hay delante de la Isla de la Prisión. Fue mi lugar preferido de toda la isla. No te lo puedes perder. Además de los corales y los peces, hay una gran colonia de preciosas estrellas de mar.
La visita a las tortugas me gustó menos. De entrada, fueron importadas, no son de Zanzíbar. Algunas tienen entre 80 y 120 años, son muy impresionantes. Pero lo malo es que están metidas en una especie de corral de barro y todo el interés reside en alimentarlas y acariciarlas. Si vas con niños, vale, pero no es de visita obligada para los adultos.
Nunca ha habido una "prisión" en esta isla. El fuerte que se visita, y que forma parte de un complejo de hotel-restaurante, solía ser un sanatorio. Es muy turístico y tampoco tiene demasiado interés.
Sin embargo, el paseo en barco por el lago es muy agradable. Te cruzarás con dhows (esos grandes barcos tradicionales) de muy cerca y tendrás unas bonitas vistas de la costa de Stone Town, o Ciudad de Piedra.