Para mí, un viaje a Indonesia es inconcebible sin un par de inmersiones en las aguas del Océano Índico. En Tulamben, tuve ocasión de realizar esta actividad imprescindible en un lugar atípico. Son unos restos de un naufragio de 128 de longitud, accesibles para los submarinistas novatos. ¡Totalmente fuera de lo común! Para mí, Tulamben es el lugar ideal para iniciarse en el submarinismo (incluso podrás observar el barco desde la superficie con un tubo y unas gafas de buceo si tu presupuesto es muy ajustado).
Si dispones de tiempo en Tulamben, infórmate sobre las condiciones meteorológicas en el centro de submarinismo y elige un día con buena visibilidad. Los restos serán aún más impresionantes, si cabe, y podrás observar mejor la vida submarina que ha tomado este buque oxidado. Mis recuerdos de aquello son imágenes dignas de un documental de televisión. Una de las escapadas más bonitas en mi joven carrera de submarinista.