
El país ofrece la opción de hacer un viaje de novios que combine cultura, tradición y paisajes de ensueño.
Rangún, Mandalay, Bagan: nombres míticos cuya sola evocación te transporta a un auténtico mundo repleto de misterio. El patrimonio birmano es sin ninguna duda uno de los más nobles y preservados de Asia. Los amantes de la cultura se deleitarán viendo la capital de los tejados de oro, visitando la célebre pagoda Schwedagon o paseando por mercados y calles de tan particular arquitectura. Tu bienestar está garantizado por la alta gama de hoteles de lujo, de encanto colonial.
El atardecer sobre el famoso puente de Mandalay te hará sumergirte en una espiritualidad fuera de lo común. Una estancia en Bagan puede convertirse en la luna de miel perfecta. No hay nada más romántico que contemplar amanecer desde un globo sobre uno de los lugares más bellos del mundo, en compañía de la persona a quien más quieres.
Los amantes de la naturaleza no quedarán decepcionados si realizan un viaje de novios por Birmaniae. ¿Hay algo más romántico que hospedarse en uno de los magníficos hoteles que bordean el majestuoso y sobrecogedor lago Inla? Embárcate en un viaje extraordinario: descubre los pueblos y jardines flotantes en barco, saliendo al encuentro de las poblaciones locales, y admira a los famosos pescadores de gesto despreocupado.
Un viaje por Birmania implica sentir la riqueza y la diversidad de una naturaleza grandiosa y espectacular: algo auténtico. Los más aventureros pueden atreverse con una excursión extraordinaria por las montañas del Estado Shan o un crucero sobre el río Irawadi, lugares tan propicios para entrar en comunión con sus encantos. Termina tu viaje de novios descansando en una playa de arena blanca, a orillas del mítico golfo de Bengala o del maravilloso mar de Andamán. Sin ninguna duda, un viaje de novios por Birmania representa una idea espectacular.