
Durante tu viaje por Egipto te sorprenderá gratamente que este país posea un amplio abanico de infraestructuras adaptadas a todo tipo de viajeros, tanto los que tengan un presupuesto limitado, como aquellos que dispongan de uno más holgado.
Durante tu viaje por Egipto te llevarás una agradable sorpresa al encontrarte con un país muy turístico que ha sabido adaptarse a todo tipo de viajeros. Aquí todos encuentran lo que buscan, desde el mochilero con un presupuesto ínfimo hasta los viajeros que van en busca del lujo legendario de las mil y una noches.
Además, el abanico de infraestructuras de alojamiento abarca desde el hotel local más pequeño, de una comodidad que roza lo superficial, hasta el hotel de superlujo. Por tanto, hay de todo y para todos los gustos: cada uno podrá alojarse según su presupuesto.
Lo mismo ocurre cuando toca sentarse a la mesa. Podrás comer por muy poco dinero en la calle, pero deberás tener cuidado con la higiene. Por la seguridad de tu estómago, te recomiendo que optes por restaurantes más clásicos a precios que también son muy razonables. Si quieres experimentar el lujo total y absoluto, podrás ir a los restaurantes más lujosos, donde los precios se mueven en torno a la media europea.
En lo que respecta a tus gastos cotidianos, te alegrará saber que Egipto es un país muy barato.
Si no te preocupa mucho la comodidad, podrás pasar la noche en una habitación doble para dos personas por menos de 40 EGP (5 €). Tendrás acceso a establecimientos de mayor calidad a pagando entre 100 y 350 EGP (de 12,5 € a 40 €). En los mejores establecimientos con comodidades occidentales y lujo, el precio suele figurar en dólares. Ahí te gastarás en torno a los 120 $ (110 €) la noche. En esos casos, el desayuno suele ir incluido.
En los restaurantes, podrás conseguir un menú completo a partir de 50 EGP (algo menos de 7 €). Un plato en un restaurante de moda en el que se sirvan especialidades occidentales puede salirte por 120 EGP (16 €). A eso debes añadirle una media del 17% de impuestos como el IVA y la propina.
Los productos cotidianos suelen ser muy baratos. Por ejemplo, un trayecto en taxi cuesta entre 5 y 10 EGP (entre 0,70 € y 1,30 €) y una botella de agua sale aproximadamente por 1,50 EGP (0,20 €) (según tus dotes de negociante).