
Si venís de viaje a Filipinas descubriréis un país en el cual las diversificación de sus recursos le permite gozar de una buena salud económica.
Junto con Tailandia, Malasia, Indonesia y Vietnam descubriréis a lo largo de vuestro viaje a Filipinas el quinto tigre asiático. Al formar parte de este grupo y también gracias a la diversidad de sus producciones, el país goza hoy en día de buena salud económica.
El PIB nacional se eleva a más de 353 mil millones de dólares, el PIB por año y por habitante es de 3500 $ (3200 €). La tasa de crecimiento ha alcanzado el 7%, así como la tasa de paro, que se sitúa igualmente en 7%. La tasa de inflación está perfectamente controlada y no sobrepasa el 0,7%. La tasa de población que vive bajo el umbral de pobreza es, sin embargo, bastante alto, alcanzando el 33%. El importe de la deuda pública alcanza hasta el 60% del PIB y el número de exportaciones es un poco inferior al de importaciones. Los principales socios comerciales de Filipinas son Estados Unidos, Japón, los Países Bajos, Hong Kong, Alemania, Singapur, Corea del Sur, Taiwán y Tailandia.
Se estima que cerca de un 70% de la población trabaja en el sector de la agricultura, que representa apenas un 12% del PIB. La producción es particularmente importante en nuez de coco, plátano, piña, caña de azúcar, maíz, tabaco y, por supuesto, en arroz. Este último recurso ha conocido una importante crisis y no es posible alimentar a todo el país con este producto, por lo que en la actualidad están obligados a importar para poder alimentar a toda la población.
El subsuelo filipino es particularmente rico en oro, cobre, hierro y cromo. Este sector de la industria aporta su parte al PIB hasta alcanzar un 33% y se compone principalmente de la industria farmacéutica, la industria química, la electrónica, el textil, la pesca, la petroquímica, la silvicultura y la industria agroalimentaria.
El desarrollo del sector terciario que representa más de un 55% del PIB se debe en parte a la llegada de inversores extranjeros.