Rodeada de colinas, arrozales y selvas, Anjozorobe es conocida por su corredor forestal extremadamente rico en especies animales y vegetales en el que, en 2005, se creó un área clasificada como Paisaje Armonioso Protegido. La reserva acoge a un decena de especies de lémures, un gran número de orquídeas, una multitud de aves, reptiles y anfibios.
Gestionada por la asociación malgache Fanamby, el área protegida Anjozorobe-Angavo es el fruto de una voluntad salvaje por salvaguardar la biodiversidad de la región y limitar los estragos causados por la deforestación creando nuevos ingresos en las poblaciones locales. Para ellos, se ha creado un centro de acogida ecoturística que permite a los visitantes amantes de la naturaleza estar más cerca de la naturaleza y de los circuitos de exploración, además de crear una fuente de trabajo para los habitantes de la región.