Las 5 razones para ir a Tadjikistan
Cuando te adentres en el país, harás algo más que un viaje: ¡vivirás una aventura! Déjate conquistar por todo lo que allí te espera.
Descubrir un país en un cruce de civilizaciones
Imagina un lugar en el que, en el transcurso de la historia, han vivido guerreros griegos, conquistadores árabes y tribus mongolas y un territorio que ha llegado a formar parte del imperio ruso. ¡La gente tiene los ojos de color claro, la piel morena, se practica el islam, se habla persa y se usa el alfabeto cirílico! Si quieres cambiar de aires, este es el lugar perfecto...
Recoorer la mítica ruta M41, una de las más altas del mundo
Marco Polo quedó deslumbrado por la belleza de las montañas de este país situado al final de la cadena montañosa del Himalaya. Las montañas de Pamir albergan una de las rutas más altas del mundo, la ruta de Pamir, que culmina a más de 4 000 m de altitud en la frontera kirguiza, entre montañas que alcanzan hasta 7 000 m de altitud. ¡Un magnífico paisaje lunar y desértico! A lo largo de esta ruta solo te cruzarás con algunos camiones chinos, pastores kirguizos y quizá algún que otro ciclista exhausto que ha decidido conquistar este mítico macizo.
Caminar por los montes Fann y sus verdes valles
Si te adentrar hacia el norte del país, verás numerosos ríos que descienden de las montañas y que trazan valles encajonados que solo dejan espacio para que los habitantes coloquen algunas casas y algunos campos de cultivo. Sube río arriba y llegarás a los montes Fann, una inmensa zona montañosa en la que las cimas alcanzan más de 7 000 metros de altitud y donde se encuentran algunos de los lagos de altitud más bonitos del mundo. Los aficionados al senderismo y a las caminatas podrán recorrer esta zona hasta quedar saciados.
Disfrutar de agradables encuentros
No obstante, no podemos reducir Tayikistán a sus paisajes; también cabe destacar el hecho de que los tayikos son tan acogedores que la recepción de invitados es casi un deporte nacional: ¿te apetece un té? ¿Un café? ¿Te quedas a comer con nosotros? Ya te irás mañana; ¡duerme en nuestra casa! Aunque no hables ruso o persa, las ganas de comunicarse y de entablar conversación es tan fuerte que acabaréis haciéndoos entender. Especialmente si hay una botella de vodka o algunas cervezas de por medio.
Dejarse sorprender por estas tradiciones tan vivas
Este país abierto al resto del mundo conserva la huella de los grandes imperios que han controlado el territorio, pero ha sabido conservar su propia cultura. Déjate sorprender por los trajes de seda que llevan las mujeres de las ciudades y los pueblos. Adéntrate en valles en los que que habla la lengua sodgiana y conocerás a los últimos hablantes de esta lengua que antiguamente se hablaba en toda la ruta de la seda. ¡Deléitate probando los yogures caseros y el Pov, un plato regional hecho con arroz y carne de cordero!
Actualizado el 8 octubre 2018