Las 5 razones para ir a Turkmenistán

¡Porque nadie de tu entorno habrá estado nunca allí!

Si preguntas a tu alrededor, a tus amigos y conocidos, si han puesto un pie en Turkmenistán, la respuesta suele ser negativa, incluso marcada por un "Turkmenistán, ¿qué es eso? ". ¿Es eso una razón suficiente para visitarlo? Realmente no. Pero si añadimos que el país ofrece paisajes de gran belleza, todavía virgenes y alejados del turismo de masas, que la hospitalidad es una de las razones para estar en Turkmenistán o que la Ruta de la Seda que cruzaba el país ha dejado lugares históricos excepcionales, entonces, probablemente, ¡será suficiente para convencerte!

Para conocer el carácter del culto a una dictadura feroz

La capital Ashgabat ​​no es, ciertamente, una de las ciudades más bonitas que visitarás durante tu viaje. Sin embargo, te dará la oportunidad de familiarizarte con una de las dictaduras más autoritarias del mundo: la de Saparmurat Niyazov, que murió en 2006. Auténtico demagogo armado de cierta megalomanía, el dictador rediseñó por completo la ciudad, de acuerdo a su imagen y sus ambiciones desmesuradas: grandes avenidas, plazas gigantescas, palacios excéntricos, edificios oficiales donde el mármol se combina con el oro... Nada era demasiado para el dictador que incluso ¡erigió una estatua de oro de sí mismo que gira con el sol! Para los amantes de la arquitectura y del mal gusto, sin duda, ¡vale la pena!

Por sus sitios históricos, testigos de milenios de presencia humana

Quién sabe, hoy en día, que Turkmenistán se encuentra justo en el recorrido de la Ruta de la Seda ​​y que su magnífica ciudad de Merv era una parada imprescindible en el largo camino que conducía a los comerciantes de Europa hasta el corazón de China. En otro tiempo tan importante como El Cairo, Bagdad o Damasco, hoy Merv es un sitio desproporcionado en ruinas, que da testimonio de la gloria pasada del lugar y ¡es una visita obligatoria durante un viaje a Turkmenistán!

Para entender la definición de la palabra "hospitalidad"

¿En qué parte del mundo eres recibido por los lugareños saliendo a tu encuentro, dándote la bienvenida, saludándote y tratando, de alguna manera, de invitarte a sus casas para hacerte probar sus especialidades culinarias regionales, sin una contraprestación económica, solo para mostrar la calidad de su cocina y de sus tradiciones? Esta hospitalidad se refuerza por la relativa ausencia de turistas y, por tanto, la curiosidad que suscita el viajero extranjero, al que se hace partícipe de las tradiciones del país que, sin duda, vas a experimentar durante tu estancia en Turkmenistán

Por sus paisajes únicos

Si pensabas que habías viajado mucho y estabas cansado de descubrir cadenas montañosas, bosques centenarios o litorales, es porque ¡todavía no has visto Turkmenistán! En el corazón de Asia, la antigua república socialista soviética ofrece paisajes absolutamente desconocidos para el ojo del viajero occidental: áridos desiertos que se pierden en el horizonte, terrenos extremadamente accidentados, mares desecados e incluso una rareza surrealista: un enorme cráter en pleno desierto del que surgen llamas ininterrumpidamente. ¡Tal vez sea una bonita metáfora de los Círculos del Infierno!