
Aunque la inmensa mayoría de la población es musulmana, en este país conviven numerosas religiones. Sin embargo, durante tu viaje a Turquía te costará más encontrar iglesias o sinagogas que mezquitas.
En Turquía, el 90 % de la población es musulmana. El islam es la primera religión del país. Para ser más precisos, habría que señalar las diferencias que hay dentro de este grupo. Por tanto, que sepas que entre el 90 % de musulmanes, el 70 % son sunitas. El 20 % restante se divide en varias ramas, con una mayoría aleví y otras comunidades más raras como los derviches giróvagos, que surgen del sufismo.
Para precisar un poco más, los alevíes son una minoría religiosa y se les suele considerar herejes, como una especie de protestantes del islam. Los hombres pueden beber alcohol, las mujeres son sus iguales, no rezan en la mezquita y consideran el Corán como la simple palabra de un hombre cuya sucesión no reconocen. Aunque no hay estadísticas formales, se calcula que son unos 15 millones de personas.
Otra particularidad que presenciarás durante tu viaje a Turquía son los derviches giróvagos. A estos religiosos musulmanes de la orden sufí solo podrás verlos en Estambul y en Iconio. Para entrar en comunión con Dios, los derviches giran sobre sí mismos durante casi 30 minutos apoyándose en la punta del pie derecho, con los brazos abiertos y la cabeza inclinada sobre el hombro derecho. El espectáculo es impresionante y fascinante, aunque hoy en día sea más bien turístico que religioso.
El 10 % restante se divide entre los diferentes grupos de cristianos y las diferentes comunidades, como los griegos o los turcos ortodoxos, los asirios o los sirios jacobitas.
Con unos 35 000 fieles, la mayoría de la población judía se encuentra en Estambul. Entre ellos, un 90 % es sefardí. El 10 % restante se divide entre asquenazís, caraítas y "marranos" (judíos conversos). Hoy en día, aunque Turquía es cada vez menos cosmopolita, las religiones conviven apaciblemente y con una gran tolerancia.