Al Hamra es una ciudad pequeña, pero sorprendente. Situada sobre una meseta a los pies de la montaña más alta del país, sólo se ve si prestamos atención. Para disfrutarla mejor, te sugiero que tomes la carretera que va hacia Misfat. Este camino despejado ofrece increíbles vistas de la ciudad y del paisaje que la rodea.
El otro interés principal de Al Hamra es su ciudadela abandonada. Es difícil describir lo que se siente cuando paseas por las calles desiertas en medio de casas de barro en ruinas. Ahí encontramos restos arquitectónicos particularmente interesantes, como puertas de madera grabadas, que ayudan a imaginar cómo era la vida en esta parte de la ciudad antes de ser abandonada por sus habitantes. La parte nueva de Al Hamra es, por supuesto, mucho más animada.
Si pasas por Djebel Shams durante tu viaje a Omán, realmente recomiendo hacer un desvío a este pequeña y encantadora ciudad.