Seguro que llegarás a Kuta en primer lugar. Te aconsejo que no te pares a descansar durante tu estancia en Indonesia.
Esta ciudad no tiene ningún encanto: es ruidosa ysucia y está llena de turistas. La mayoría son australianos que se pasanlas noches de fiesta por los clubs de moda y los días bebiendo cervezaen la playa.
Yo me quedé un día y fue más que suficiente.Quería ir a la playa porque Kuta sigue siendo un destino legendario para el surf, así queme alquilé una tabla de surf por dos horas y traté de imitar a los más pros. Melo pasé muy bien, aunque a la vez pasé un poco de miedo, porque las olasse ponían a veces muy peligrosas. ¡Ten también mucho cuidado con los carteristas enla playa!
En el centro había una ristra de restaurantes,cafeterías y hoteles donde ponían comida occidental para turistas. Losvendedores de la calle tenían suvenires a precios desorbitados.
Así que, en seguida, me eché a la carretera en busca de otrosparajes más agradables.
Ciudad impopular entre los viajeros, Kuta es y seguirá siendo para mí un sitio de surferos y turistas (principalmente australianos) en busca de noches fuertemente alcoholizadas. Las tiendas, salones de masaje, bares, hoteles y restaurantes inundan las calles. Aquí no hay nada que sea balinés. Todo es para los turistas. Los precios son excesivos y la calidad, mediocre. De todas formas, si buscas bien, siempre puedes encontrar algún warung o alguna pensión baratilla y con buenas prestaciones.
Y, a pesar de todo, esta ciudad es el punto ideal para aprender a surfear y para salir de fiesta durante un viaje por Bali. Al estar tan cerca del aeropuerto, Kuta sigue siendo muy práctica si tienes que coger un vuelo por la mañana temprano. Con un día o dos tienes de sobra para ver lo poquito que la ciudad te puede ofrecer y para no agobiarte entre su turismo masivo.