Burj Khalifa se ha convertido en el emblema de la ciudad de Dubai. Esta torre de 828 m de altura es impresionante. Con la entrada podrás subir a la terraza principal, en el piso 124. Después de pasar los controles de seguridad necesarios, recorrerás largos pasillos con la historia y la construcción de la torre. A continuación, entrarás en uno de los ascensores más rápidos del mundo. Es impresionante ver los números de pisos correr durante el ascenso y notar la facilidad del ascensor.
Cuando las puertas se abren, tienes una vista directa a las grandes ventanas que ofrecen un increíble panorama de Dubai. Uno siente que domina la ciudad. Lo que me sorprendió más fue ver desierto en las afueras de la ciudad. La arena está realmente en la ciudad, o mejor, Dubai está realmente construida en el desierto. Sin embargo, desde ahí podrás ver que la ciudad es más verde que algunas ciudades europeas.