De camino hacia el norte y hacia Laponia, Jyväskylä es prácticamente de paso obligado si vas por la carretera de la región de los lagos. Aunque la ciudad no es especialmente bonita, con solo una iglesia y algunos edificios con cierto interés histórico, su encanto es otro: Jyväskylä está compuesta por más de 300 lagos, que se reparten por todo el centro de la ciudad. Por esa razón es un gran centro de actividades a lo largo de todo el año, ya se trate de bañarse y hacer windsurf en verano, o patinar sobre hielo en invierno.
Además, al igual que el resto de Finlandia, se visita sobre todo para explorar la naturaleza de alrededor y en Jyväskylä tendrás para dar y tomar. En plena región de los lagos, también conocida como país de los mil lagos, te encontrarás en un ambiente totalmente ideal para hacer senderismo, excursiones o safaris para ver los animales de la región.