No puedo más que aconsejarte detenerte en Ganvié durante tu viaje a Benín de lo llenos de magia que están mis recuerdos. El trayecto en barca para llegar a este pueblo es tan bello, te cruzas con muchos pescadores y zonas de piscicultura, así como embarcaciones de todo tipo.
Es un pueblo atípico cuyos habitantes viven sobre el lago Nokoué. Las piraguas son el único medio de transporte los habitantes de Ganvié. Las casas hechas de madera, paja o diversos vegetales son pintorescas y armonizan con el entorno natural.
Las casas sobre pilotes están llenas de niños que juegan, rien, saltan, se bañan... ¡Había tanta vida en ese pueblo! Vivir sobre el agua y sin electricidad en este pueblo fue una experiencia memorable, pues al caer la noche, las velas brillan con mil colores, los turistas se van y... el tiempo se detiene. Los albergues y los bares no carecen de encanto y autenticidad. Sin embargo, debo prevenirte que la mayoría de los habitantes de Ganvié viven en la miseria y si te alejas de los circuitos organizados, lo comprobarás por ti mismo.
Mis mejores recuerdos son el mercado flotante tan colorido, el baño en el lago con los niños y mi primera travesía por el pueblo al ritmo de los dyembes de una boda no muy lejana. ¡Inolvidable!