Ankavandra está situada a los pies de la meseta de Bongolava y a orillas del río Manambolo, que se puede descender en piragua a partir de aquí para alcanzar la ciudad de Bekopaka, a la entrada del parque nacional de Tsingy de Bemaraha, imprescindible durante una estancia en Madagascar.
Importante en otra época gracias al cultivo del algodón y del tabaco, la ciudad de Ankavandra ha caído hoy en día un poco en el olvido, incluso se ha suprimido el vuelo que la conecta con Tsiroanomandidy. Se accede después de atravesar la meseta de Bongolava y sus extensiones de colinas herbosas llenas de lavakas, antes de alcanzar por fin la meseta y comenzar el empinado descenso en dirección a la ciudad. Tras una noche al raso a orillas del Manambolo, comienza el lento descenso del río en pequeñas piraguas.