El pueblo se encuentra en las orillas del canal de Mozambique, en la desembocadura del río Tsiribihina. Su población agrícola vive de los cultivos de arroz, habones, judías y tabaco. El lugar está cargado de historia ya que aquí se encuentran las tumbas reales de Tsianitry, incluyendo las sepulturas del rey Toera, muerto a manos del ejército francés, y las de los príncipes Georges y Pierre Kamany.
Belo-sur-Tsiribihina es también un pueblo sagrado y cada 10 años celebra la ceremonia de «Fitahompa» durante la cual se sumergen las reliquias sagradas en el río siguiendo unos rituales muy precisos.
Los más atrevidos podrán dar un paseo a través de los manglares y del bosque para visitar las tumbas adornadas con esculturas eróticas (a unos 8 km de distancia del pueblo). ¡Una experiencia insólita!