A medio camino entre Mananjary y Mahanoro, los cruceros en el canal de Pangalanes hacen ahí un alto para pasar la noche antes de retomar la carretera, perdón, el canal, al día siguiente. El nombre de Nosy Varika procedería de la presencia de numerosos lémures en los bosques que rodeaban en otro tiempo la ciudad.
La cascada más grande de Madagascar, la cascada Sakeleona, con una altura de 200 metros, se encuentra en los alrededores de Nosy Varika, pero llegar allí no es sencillo. Para los aventureros interesados, hay que partir en dirección a la aldea de Ampasinambo a una centena de kilómetros al oeste, la pista es difícil y se necesita un vehículo todoterreno. Desde allí, hace falta contar con una jornada de marcha para llegar a la cascada, cerca de la cual se pasa la noche antes de retomar el camino inverso al día siguiente... ¡una experiencia garantizada lejos de los destinos habituales!