La ciudad es algo menos impresionante que otros pueblos pequeños de pescadores de la región, que descansan en las paredes rocosas de la costa mediterránea. Sorrento tiene un aspecto más urbano y comercial, algo que le gustará a muchos. Las calles pavimentadas del centro de la ciudad albergan numerosas tiendas de artesanía local. Además, la ciudad ofrece hermosas playas, tanto en el centro como en los alrededores.
Esta ciudad puede ser una base perfecta para recorrer la región debido a su localización: cerca de Nápoles, de la costa Amalfitna, de Pompeya, del Vesubio e incluso de Capri. Te conviene especialmente si quieres escaparte y descubrir el frenesí urbano de Nápoles. En resumidas cuentas: no es una etapa indispensable durante un viaje por Italia, pero es una buena base desde la que explorar la región de Nápoles.
Con el perfil del Vesuvio frente a la isla de Capri, la península de Sorrento es una escala a anotar en tu itinerario por Italia. Fue una de mis etapas favoritas durante mi viaje por Italia. Hacer una escala en Sorrento significa disfrutar de horas de diversión, descubriendo nuevos sabores, subiendo las estrechas escaleras, paseando por las callejuelas, probando nuevos sabores de helados, bebiendo cafés de ricos aromas y comiendo delicosos platos en sus trattorias, todo ello mientras interactúas con los simpáticos habitantes. Sin duda alguna, es un lugar imprescindible en una visita a Italia.
La ciudad está ubicada cerca de la tistemente famosa Pompeya, que es una interesante visita que se puede hacer tras tu estancia en Sorrento, en Italia. Las vistas del Vesubio durante la puesta de sol, junto con el cielo teñido de múltiples colores pastel, son magníficas, un momento totalmente romántico.