Fundado en 1887, el Tongariro National Park es el parque más antiguo de los parques nacionales de Nueva Zelanda. Si eres un fan del Señor de los Anillos, estarás encantado, el Tongariro National Park se cuenta entre los lugares de filmación de la película, y no menos importante, es la tierra de Mordor...
El parque alberga dos de las caminatas neozelandesas más famosas: el Tongariro Northern circuit, una caminata de 3 días y el Tongariro Alpine Crossing, una caminata de 16,4 km, a menudo mencionado como uno de los recorridos más hermosos del mundo.
¡No le han regalado ese calificativo! Con seis a ocho horas caminando podrás ver los campos de rocas volcánicas, volcanes, cráteres y lagos con colores brillantes... Me enamoré del encanto de este recorrido que he realizado en dos ocasiones. A principios de otoño, los volcanes están adornados con un manto de nieve, y hacen que los paisajes sean aún más extraordinarios.
Sin embargo, no esperes estar sólo durante el recorrido, la caminata recibe cada año a un raudal de turistas. A pesar de que es un poco larga y tiene algo de desnivel (900 metros), esta caminata no presenta demasiadas dificultades, si bien algunas subidas son bastante empinadas. Admito haber sufrido un poco en el largo ascenso en el que hay construido una escalera. Si todavía tienes fuerzas, puedes subir hasta la cumbre del Tongariro, desde donde tendrás una vista impresionante de los volcanes circundantes. En un día claro verás de lejos el cono volcánico del Mont Taranaki.
La primera vez que quise hacer la marcha de Tongarino, había una niebla que se podía cortar con un cuchillo y ¡no pude ni siquiera vislumbrar la montaña! Tuve que renunciar al proyecto y cambiarlo por el descubrimiento del lago Taupo. El año pasado volví y ¡estaba previsto un día muy soleado! Al día siguiente hay que levantarse a las 7h30 para ir en autobús hasta el punto de partida de la marcha, porque no es un circuito cerrado, generalmente te llevan y después te recogen al finalizar la etapa, tú tendrás que hablar con tu alojamiento para la organización.
La marcha de Tongarino no es difícil pero la primera parte sube, de todas formas, bastante y el terreno, muy rocoso, puede ser delicado para los que tienen cierta fragilidad a nivel de los tobillos. El lugar más bello para mí fue la vista de los dos lagos. El fin del recorrido es más boscoso y la fatiga comienza a instalarse, ¡jamás deseé tanto llegar a un aparcamiento!
Es posible también hacer el circuito norte en 2/3 días y así quedarse más tiempo en los alrededores. Las aldeas al pie del parque están totalmente orientadas hacia la práctica del senderismo y aparte de eso no hay gran cosa que hacer.