¡Shalom y sé bienvenido a Israel! Pocos países pueden alardear de tener una historia multi-milenaria y de ser, por tanto, aún y siempre un destino moderno y buscado, donde se mezclan todos los estilos y todas las tendencias. Viajar a Israel es, lo primero de todo, zambullirse en una tierra donde la leyenda y lo real están íntimamente entremezclados. Desde las pequeñas calles de Jerusalén al Monte de los olivos, de la fortaleza de Massada al Sinaí, del Muro de las lamentaciones a Tel Aviv, no hay un solo lugar que no se haya citado en algún texto histórico… ¡y mejor! Sin embargo, Israel no es sólo eso: La estación balneario de Eilat, la ribera del Mar muerto o incluso los largos paseos por el desierto son otras muchas de las posibilidades de excursión, paseo o aventura, que piden a gritos ser vividas. Por qué no intentar igualmente ir a Palestina donde serás acogido por un pueblo fiel y cálido, siempre encantado de poder compartir su historia y su extraordinario patrimonio, forjado durante miles de años por diferentes culturas que lo han habitado. Así que atrévete y ve, tú también, a explorar este país desconocido y descubre, día tras días, las mil y una facetas de un destino ¡definitivamente diferente a los demás!