Si visitas la reserva fáunica de Shaumari descubrirás un centro de reproducción de especies raras y en vías de extinción. Situada a unos 120 km al este de Amán, la reserva se divide en dos zonas: por un lado, un área semidesértica cruzada por una corriente de agua y, por otro, un desierto de piedra recubierto por una capa de sílex negro. Ambos espacios, totalmente preservados, forman un sorprendente decorado en el que habitan onagras, hienas rayadas y chacales dorados, entre otros.
El órice de Arabia y su pelaje blanco son la estrella del lugar. Prácticamente desaparecido en la década de 1970, en Shaumari hoy en día la cifra de ejemplares asciende a unos 200. Pasean libremente por toda la reserva y se pueden ver durante un safari. Fíjate bien: puede que veas otras especies protegidas como el avestruz, el hemión o la gacela. Para no molestar a estos animales en su entorno natural, es importante que sigas las indicaciones de tu guía.
Si te gusta mucho la ornitología, podrás subir a una torre de observación. Con unos prismáticos, tendrás la oportunidad de avistar numerosas aves, como el águila imperial o el alimoche. Estos suelen dejarse ver con aún más facilidad en otoño, en periodo de migración.