Los objetos artesanos mexicanos son una buena muestra de la calidad artística de un país que ha sabido conservar sus técnicas ancestrales a lo largo de su historia. Podrás comprobarlo en los talleres de fabricación y, sobre todo, en los alebrijes. Se cree que estas esculturas de madera típicas del país surgieron en el pueblo de Arrazola, en el estado de Oaxaca. Cuando organices tu programa para descubrir México con tu agente local Evaneos, no dudes en preguntarle cómo puedes añadir esta experiencia a tu viaje.
Si te alojas en Yucatán, en el sureste del país, podrás contemplar la producción de henequén, una especie de esparto tradicional elaborado a partir de un agave endémico. En la Hacienda Sotuta de Peón, un lugar confidencial y repleto de tradiciones, podrás conocer los secretos de fabricación de esta fibra y contemplar las cestas, alfombras y otros objetos que se pueden elaborar con ella. La península también se especializa en la fabricación de una hamaca con un tejido maya, que podrás encontrar en los talleres de Mérida, en el oeste de la península.
La destreza de los aztecas, expertos en la cerámica, los metales y los textiles, ha perdurado en el tiempo, pero la huella de otras civilizaciones precolombinas también está patente en la artesanía mexicana contemporánea. La fabricación del famoso panamá, por ejemplo, incluye detalles que ya realizaban las tribus amerindias hace varios miles de años. Si haces una pausa en Becal, una pequeña ciudad del estado de Campeche, en la península de Yucatán, podrás observar cómo se confeccionan estos sombreros.