Dormir en un alojamiento excepcional en Perú

Después de una excursión o una larga jornada de visitas, nada mejor que descansar cuerpo y alma. Para ello, ¿por qué no optar por un hotel excepcional? En Cuzco, una de las puertas de entrada del Machu Picchu, puedes despertar dulcemente tus sentidos en un antiguo monasterio construido a finales del siglo XVI en un palacio inca. Desayuna en el jardín del claustro y cárgate de energía para afrontar un nuevo día de visitas.

A orillas del lago Titicaca, en la frontera entre Perú y Bolivia, al otro lado del mundo. Disfruta de un relajante retiro a orillas de esta joya, en una península privada situada a menos de 50 km de Puno. Desde la ventana panorámica de tu moderna habitación, podrás observar las relucientes aguas del lago, especialmente bonitas con los primero rayos de sol y al atardecer.

Disfruta del confort de un alojamiento situado en pleno corazón del bosque amazónico. Además de observar el río desde tu balcón privado y relajarte en la piscina, tu estancia en la jungla te garantiza momentos de calma en un entorno natural excepcional. En el sureste del país, ¡disfruta de una completa relajación! Vive un panorama idílico desde una hamaca y el canto de los pájaros del río Madre de Dios de fondo.