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Jordania en mayo se encuentra disfrutando de su primavera, temporada en la que las temperaturas son muy agradables, situándose las máximas en los 28ºC aproximadamente y las mínimas en los 15ºC. El mes de mayo es sin duda uno de los mejores del año para conocer este país de clima desértico y seco que recibe influencias del Mediterráneo en la zona occidental cerca de sus costas.
Si te gusta el senderismo vas a poder hacer numerosas rutas a pie en la zona de Petra, especialmente en Wadi Rum, donde también podrás practicar escalada para después disfrutar de una experiencia única como es dormir en el desierto al caer la noche. Desde allí puedes dirigirte hasta el sur del puerto de la ciudad de Áqaba para disfrutar de uno de los fondos marinos más bellos de todo el mundo haciendo submarinismo. Mayo también es el mes perfecto para recorrer la carretera del rey, una vía que atraviesa numerosos pueblos y que te acercará hasta la garganta del Wadi Mujib o hasta los mosaicos de Madaba.
Los dos mejores periodos para viajar a Jordania son la primavera y el otoño, ya que las temperaturas son más agradables en esas épocas del año. Entre noviembre y marzo, abundan las precipitaciones. En invierno, llega a hacer mucho frío e incluso puede nevar. De todas formas, conviene informarse sobre las diferencias climáticas entre las regiones. A pesar de que, en verano, la temperatura en el desierto oriental es llevadera, el desierto del sur puede llegar a ser muy caluroso. Descubre un país impregnado de historia, con una cultura fascinante y que destaca por la hospitalidad de sus habitantes. Visita Petra y Wadi Rum o recorre el desierto en este fabuloso país de Oriente Medio.