Gamla Stan atrae mucho y es el barrio más famoso de Estocolmo. Se ha convertido en una visita ineludible durante un viaje por Suecia.
Me gustó poder ver el cambio de guardia delante del Palacio Real y me fascinó su capacidad de resistir el frío. Además, me encantó la plaza central y sus fachadas con colores cálidos. Me quedé allí un rato para observar a los habitantes y tomar algunas fotos. Si te gustan los lugares insólitos, te aconsejo que andes hasta la calle más pequeña de Suecia, que se encuentra a poca distancia. Es realmente extraordinaria.
Y por último, visita Gamla Stan, donde hay muchos monumentos históricos que están muy cerca los unos de los otros, por lo que te da la impresión de encontrarte en un lugar fundamental de la Suecia actual.
Gamla Stan es muy turístico. Lógico, porque allí están los principales monumentos de la ciudad, como el Palacio Real. Visité esta parte de Estocolmo la primera vez que fui a la ciudad, hace varios años, pero ya no voy mucho porque prefiero descubrir otros barrios.
Recorrer la isla es muy agradable, con sus calles adoquinadas y sus casas de colores. También allí, en sus numerosas tiendas, podrás encontrar todos los souvenirs que quieras llevarte.
Una vez, hice frente al frío y a las noches que comienzan a las 14.00 para ver cómo era Estocolmo en invierno. Fui con ocasión de las fiestas de Santa Lucía (13 de diciembre), cuando se programan un montón de conciertos en las viejas iglesias de Gamla Stan y puedes entrar en calor con un buen vino caliente en el mercado navideño de la plaza de Stortorget.
En esa misma plaza visité el museo Nobel. Te recuerdo por si acaso que Alfred Nobel era sueco y que estos famosos premios se entregan cada año en Estocolmo.