El coreano
El alfabeto coreano o hangul fue inventado en el siglo XV para reemplazar a los caracteres chinos empleados hasta entonces. El hangul se prohibió poco después por razones políticas. Permaneció prohibido hasta principios del siglo XX. El alfabeto hangul consta de cuarenta signos. Es un sistema mucho más simple que el de los ideogramas chinos. Todavía se siguen empleando sinogramas, aunque poco, en los círculos académicos e intelectuales. Gran parte del vocabulario coreano proviene del chino. Aproximadamente el 60% de las palabras coreanas son préstamos del chino. También está incorporando cada vez más palabras de otras lenguas, como el japonés, el inglés o el francés, fenómeno que no ocurre con el coreano de Corea del Norte.
Cada región de las dos Coreas tiene su «habla» particular, que puede variar más o menos de lo que es la lengua oficial. En general, el coreano se lee de izquierda a derecha y de arriba a abajo, aunque la poesía ha conservado el formato tradicional de derecha a izquierda o en columnas.
Las lenguas extranjeras en Corea
En Corea del Sur, la gente joven suele hablar inglés. Lo empiezan a aprender en la escuela primaria y muchos hacen intercambios universitarios en países angloparlantes. En el instituto tienen también la opción de estudiar dos años de japonés, español, francés o alemán. A consecuencia de la colonización japonesa, que tuvo lugar entre 1910 y 1945, muchos coreanos saben japonés.