Al anunciar a tu entorno que preparas un viaje a Isla Mauricio, las palabras que más oirás serán "suerte", "playa" o incluso "cocoteros" y "arena blanca". Otros te hablarán de senderismo o incluso de shopping y artesanía. De hecho, Isla Mauricio concentra todo en una pequeña superficie de apenas 45 km de este a oeste, y 65 km de norte a sur.
La comunidad Evaneos tiene varias ciudades y pueblos para recomendarte para tu estancia en Isla Mauricio. Empezando por Port-Louis, la capital. Su mercado de verduras y su parte artesanal merecen ser visitados. La perla del océano Índico esconde todavía muchas sorpresas: bronceado en la isla de los Ciervos, jam musical con ambiente de acampada en la playa de Tamarin (hay prácticamente todos los fines de semana), pasada con los niños en elparque de cocodrilos de La Vainilla o incluso un pequeño viaje en el tiempo en Morne-Brabant...
La playa secreta de La Cambuse también es un must si buscas tranquilidad. No obstante, tendrás que preguntar el camino a un conocedor una vez in situ. Para toda la parte de recuerdos de las vacaciones, el mercado de Quatre-Bornes es el punto de referencia para los viajeros a algunos días de la vuelta a su país de origen.
Dicho esto, si el objetivo de tu viaje es más bien dejarte sorprender por tu instinto, tampoco te decepcionará. Isla Mauricio y sus habitantes te acogerán con brazos abiertos si deseas bailar, cantar, comer, nadar, conocer a los lugareños o incluso... no hacer nada de nada, si no es dar celos a tus amigos con tus fotos. Sobre todo, ¡no olvides disfrutar! Buen viaje