Mi paso por Muang Sing figura entre mis mejores recuerdos de mi viaje a Laos. Vine a este alejada región de Laos para hacer caminatas en el campo y conocer las diferentes etnias.
Las escasas agencias que proponen esta excursión piden 100$ por persona. Afortunadamente, he probado por ti y tengo una alternativa muy económica. Informándome, he conseguido los nombres de los pueblos atravesados y después he alquilado una bicicleta por 1$. ¿Gracias, no?
Al día siguiente, di una vuelta por el mercado del pueblo que es muy auténtico. Una decena de etnias está presente para vender sus productos cada mañana. Muy colorido, el mercado es un paraíso para los fotógrafos. Parece que en algunos puestos venden opio. Yo no lo he visto pero presta atención. La policía vigila incluso en este apartado rincón y las prisiones laosianas no brillan por su confort. En cuanto al paseo en bici, una sola palabra: ¡Maravilloso! Pedaleé por pequeñas pistas entre los campos, atravesé bellos ríos en medio de un encantador paisaje. Recibí formidable acogida en los pueblos. Hice un tramo de mi camino con dos monjes, un pescador me invitó a comer con su familia, incluso canturreé una cancioncilla en una clase y ¡bailé hasta la noche en una boda! Pasé una estancia inolvidable en Muang Sing.
Me estaba quedando en Luang Namtha con un amigo del viaje, y alquilamos una moto para pasar el día, e ir hasta Muang Sing, el pueblo ubicado en el norte del país, en la frontera con China. Pasamos un día muy bonito, la carretera era peligrosa llena de agujeros, baches, y socavones...
Zigzagueamos en las carreteras de montaña, nos paramos cerca de un río y en los pueblos de la carretera de Muang Sing... La gente era muy curiosa y amable, si bien eran un poco desconfiados. Las montañas chinas que bordean las llanuras de Laos son magníficas , a pesar de los guardias fronterizos armados con kalachnikov.
Nos tomó algo de tiempo encontrar un lugar para comer en Muang Sing, ya que está practicamente desértico y la gente local es bastante desconfiada, y no muy sonriente. 45 km separan Luang NamTha de Muang Sing, pero nos tomó casi 3 horas para llegar...
Lo mejor: hay que pararse por la carretera para disfrutar del paisaje y conocer a la gente de los pueblos.
Lo peor: la ciudad no es demasiado hospitalaria ni acogedora, no tuvimos donde alojarnos.