Durante una estancia en Laos, no te puedes perder la meseta de Bolaven. Es una zona única en el país, con cascadas que caen desde una altura impresionante. Es además una región muy fértil para el cultivo.
Tres días en las montañas de Laos
El Bolaven es tan grande que, si quieres hacer una vuelta de reconocimiento completa, vas a tener que contar con dos noches, mínimo. Podrás ver docenas de cascadas. La más impactante es la de Tad Fane. En realidad, son dos cascadas en una. Las dos se precipitan hacia el fondo de una garganta de 200 m de profundidad. Encontrarás muchos albergues y hoteles donde pasar la noche.
Si te gusta la naturaleza, aprovecha la región para pasear y hacer senderismo. Hay rutas preciosas y a la mayoría de las cascadas se puede llegar andando. Por ejemplo, el Tad Fane Resort organiza excursiones en grupo para explorar la montaña de Bolaven y conocer a sus habitantes.
Uno de los mejores cafés del mundo
Visita la ciudad de Paksong para descubrir sus plantaciones de café, ¡hectáreas y hectáreas! Además, tendrás ocasión de probar uno de los mejores cafés del mundo. Y es que, con su altitud, vegetación y clima húmedo y tropical, reúne los requisitos perfectos para producir un café de calidad superior. Unas cinco mil familias viven de la producción de café.
Una escapada por caminos muy poco concurridos
La región de Bolaven es poco turística. Son pocos los viajeros que se aventuran por los pueblecitos de Attapeu, que rebosan encanto. Los amantes de los viajes poco convencionales se lo pasarán en grande visitando templos tradicionales laosianos y haciendo rutas por paisajes increíbles.
