Hay pocos lugares en el mundo donde se pueda ver un tigre en estado salvaje. Un viaje a Nepal te da la oportunidad de vivir este momento mágico.
Ir hasta allí y las precauciones a tener en cuenta
Para todos los amantes de la vida animal, así como para todos los demás, ver un tigre en estado salvaje es un sueño difícil de realizar, y aunque el momento es realmente mágico, desgraciadamente cada vez es menos frecuente. Hay que decir que el tigre es un animal en vías de extinción, muy amenazado por el hombre y que se deja ver muy poco. Si quieres aprovechar tu viaje a Nepal para probar suerte y contemplar un tigre, puedes dirigirte por ejemplo al parque de Chitwan, que es el más cercano de la capital Katmandú. Pero es mucho más lejos, en lo más remoto de la región de Terai, en el parque Bardia, donde tendrás un poco más de probabilidades de verlos.
Necesitarás mucha motivación para venir en autobús hasta aquí. El viaje desde Katmandú es interminable, y la ubicación es todavía peor desde el terrible terremoto de 2015, lo que no ha hecho más que deteriorar aún más las carreteras que ya estaban en mal estado.
Para evitar perder demasiado el tiempo y tener un poco de comodidad, tendrás que viajar en avión. Un vuelo te llevará hasta la ciudad de Nepalganj, y después todavía te faltarán 5h de autobús más hasta el parque de Bardia. A pesar de que la situación ha mejorado mucho desde que fue integrado por el gobierno, los maoístas han ocupado Terai. Así que siempre es conveniente informarse antes sobre el nivel de seguridad antes de dirigirse al sitio, por ejemplo en el sitio del gobierno.
Ver los tigres
Una vez que hayas dejado por fin tus maletas en uno de los alojamientos de la ciudad, tus primeros pasos por el parque de Bardia te harán olvidar rápidamente las incontables horas que has pasado en la carretera.
La ventaja más grande de este parque es su aspecto salvaje y bien conservado. A diferencia de Chitwan, que siempre atrae a más turistas, aquí tendrás muchas oportunidades de encontrarte solo y seguir los rastros del tigre de Bengala. Los vehículos están prohibidos, y tendrás que moverte en elefante para intentar verlos.
Otra ventaja, esta vez económica, un paseo a lomos de un elefante en Bardia cuesta dos veces menos que en Chitwan, y dura el doble del tiempo. Lo que multiplica tus posibilidades de ver los tigres.
El parque de Bardia es uno de los pocos lugares del planeta donde es casi seguro que puedas ver a este animal tan fascinante.
