Todo el mundo dice que el Masái Mara de Kenia es el parque con más renombre por sus safaris. Sin embargo, los especialistas te dirán que si quieres ver los parques más bonitos te hagas un viaje por Tanzania. Como el país recibe menos turistas que Kenia, los parques Serengueti y Ngorongoro son mucho más salvajes.
Por supuesto, el objetivo de un viaje a Tanzania es hacer un safari. Por delante incluso a la ascensión del Kilimanjaro el país ha centrado toda su economía turística en el sector de los safaris. Y el Parque Nacional Serengueti es la estrella.
Sus inmensas llanuras son tan bonitas y singulares que incluso han sido clasificadas como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. En esta enorme sabana podrás encontrarte con las típicas escenas de la vida animal que habrás visto en los documentales de la tele. Sin embargo, aquí la naturaleza está en su estado más puro y salvaje.
Para disfrutar al máximo de tu viaje, quédate todo el tiempo que puedas, pero creo que lo mínimo son tres días. En el Serengueti, además de cientos de especies animales, verás con toda seguridad a los famosos cinco grandes (león, leopardo, elefante, búfalo, rinoceronte). A lo largo de todo el año, el paisaje va cambiando con las estaciones. Para ver a los animales la mejor época es la estación seca, de junio a noviembre, cuando la hierba está rasa.
Todos los años, el Parque Nacional Serengueti es el escenario de las grandes migraciones de ñus. El espectáculo es excepcional. Aunque comienzan en febrero, en mayo y junio están en su punto álgido.
También considerada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, la zona de conservación de Ngorongoro suele describirse como la octava maravilla del mundo. Al fondo de este gigantesco cráter hay un gran paraíso terrestre. Allí, la concentración de animales es la mayor del mundo: no estarás más de 30 segundos sin ver alguno. Para preservar estos lugares salvajes, que no te sorprenda cuando te digan que no se puede estar más de 6 horas en el fondo del cráter.
En este paisaje idílico, todos los animales de la sabana están presentes, salvo las jirafas, que no son capaces de descender por las paredes del cráter. No hay muchos elefantes y los leopardos son pocos y discretos. Ya que el Ngorongoro está en pleno territorio masái, aprovecha que estás allí para visitar algún pueblo tradicional.
Según muchos viajeros, el Ngorongoro es el lugar más bonito de Tanzania.