Durante mi primer día en Bodrum, me dio tiempo a realizar todas las visitas turísticas posibles así que me puse a investigar qué lugares de alrededor podían merecer la pena. Didim es uno de esos lugares desconocido para los turistas extranjeros aunque muy apreciado por los turcos.
Allí podrás descubrir cómo son las vacaciones "a la turca", simpatizar con los habitantes locales y sobre todo disfrutar de deportes náuticos en familia (Didim Aquapark).
Si lo que prefieres es vivir una experiencia cultural e histórica en profundidad es mejor visitar las ruinas del templo de Apolo, que estuvo en construcción durante seis siglos pero nunca llegó a ser terminado. Según mi guía, es uno de los restos mejor conservados de la Edad Antigua (algo que puede no parecer evidente cuando estás en el lugar). Si ya has estado en la Cisterna Basílica de Estambul, reconocerás las similitudes presentes en las cabezas de la Medusa de ambas construcciones, aunque la del templo de Apolo está mejor conservada.
Las temperaturas en Didim son suaves durante todo el año y de hecho esta visita tuvo lugar a finales de octubre. Aconsejo fervientemente hacer un tour y explorar el resto de la región (las ruinas de Milet solo están a 30 minutos en coche).