Llegué a Tay Ninh desde Ho Chi Minh con la idea de descubrir esta religión, tan novedosa como ignorada. Pues fue un momento incomparable de mi viaje por Vietnam.
Al llegar al templo, me encontré frente a frente con una especie de catedral-pagoda ultra kitsch. Parecía el castillo de alguna princesa Disney. ¡Y por dentro era todavía más pintoresca! Había dragones trepando por las columnas y los colores eran... llamativos, no, lo siguiente. La escultura principal, el objeto de culto más grande, era una tremenda bola azul con el ojo divino. También había estatuas de Buda, Confucio, Jesucristo, Lao-Tsé... Esta religión fue fundada en los años veinte del siglo pasado por Ngo Van Chien. El caodaísmo es una mezcla que ha cogido lo mejor del cristianismo, del budismo, del confucionismo, del taoísmo y del islam. Lo más curioso es que los fieles practican sesiones de espiritismo. También veneran a Victor Hugo, Juana de Arco, Descartes, Pasteur, Shakespeare y Lenin y tienen contacto con ellos habitualmente (!) ¡Pero silencio! La ceremonia está a punto de comenzar. Las mujeres se instalan al fondo a la izquierda; los hombres, a la derecha. Todos van vestidos de un blanco inmaculado. Hay músicos acompañando los rezos. Los dignatarios llevan colores diferentes en función de su filiación ideológica. Los confucionistas, de rojo; los taoístas, de azul; los budistas, de amarillo.
La ceremonia parecía muy codificada. Aunque no entendí gran cosa, fue una experiencia muy interesante.