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¿Estás pensando en realizar un viaje a Marruecos en primavera? Lánzate a la aventuraen este mágico destino conociendo sus principales ciudades como Marrakech o Casablanca llenas de tradición y cultura. La estación primaveral te ofrecerá una suave temperatura, que te invitará a recorrer cada uno de sus ríncones descubriendo la belleza de Chaouen y la impresionante arquitectura en Fez.
Realizar un viaje a Marruecos en primavera es una oportunidad para conocer su cultura recorriendo sus pueblos y ciudades. Además, con la posibilidad de planificar tu viaje a medida con la ayuda de los agentes hispanohablantes de Evaneos, podrás sacar mayor partido a tu viaje, aprovechando tu visita a la ciudad roja de Marrakech, conociendo los enclaves de Casablanca, recorriendo la Medina en Fez y el pasado español en Tánger.
Realiza un tour guiado para conocer sus principales enclaves, descubriendo su Menara, el olivar, el estanque dorado y la mezquita de la Koutoubia. Impresiónate con el patio interior de la Medersa ben Youssef lleno de azulejos de colores y descubre a los artesanos en el Zoco de los Tintoreros. Por la noche, recorre la plaza de Jma el Fná donde contemplarás la agitada vida de la ciudad.
Disfruta de la brisa marina paseando por el Boulevard de la Corniche mientras tienes unas impresionantes vistas a la Mezquita Hassan II. Piérdete por su mercado central, llegando al corazón de la ciudad y conoce la Plaza Mohammed V que reúne innumerables joyas arquitectónicas. Aprovecha y realiza una excursión a Rabat para conocer su Palacio Real, el Mausoleo de Rey Mohammed V y la Torre de Hassan.
Conoce las dos áreas de la ciudad, la parte emergente conocida como ciudad nueva y la medina con su kasba y los zocos. Recorre el antiguo barrio español y llega al Cabo Espartel donde te sorprenderá una zona residencial entre frondosos bosques. Realiza una excursión a la azulada ciudad de Chaouen, con sus aires a Andalucía, donde podrás descubrir las ruinas de la antigua ciudad fenicio-roma de Volúbilis.
Contempla a tu llegada a la Medina Fez-el-Bali, la puerta de tres arcos de mosaicos azules, piérdete por sus callejones y descubre este barrio del siglo VIII. Conoce la bella Medersa Bou Inania, una de las escuelas coránicas que mejor se conservan en Fez y disfruta de la artesanía reunida en el museo Nejjarine. Por supuesto, visita el imponente Palacio Real del siglo XIV y su barrio judío.
En tu viaje a Marruecos en primavera el tiempo puede variar en función a la zona donde vayas, aunque normalmente suele presentar un clima templado todo el año. Marruecos en primavera, entre los meses de marzo a junio, cuenta con un clima seco, con una media de 11 horas de sol al día, presentando unas temperaturas que oscilarán entre 10ºC de mínima y unas máximas de 31ºC.
La mejor época del año para ir a Marruecos es la primavera o el otoño, cuando las temperaturas son más agradables. En verano, las temperaturas pueden ser sofocantes y el invierno no resalta tanto los encantos de Marruecos, sobre todo porque puede llover en el norte. Si soportas bien el calor o si vas a la montaña, también puedes considerar ir entre mayo y septiembre.