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El viajero que esté interesado en recorrer una ruta gastronómica por Vietnam está de enhorabuena, ya que el país del sudeste asiático presenta una enorme variedad gastronómica basada en los productos frescos y las preparaciones milenarias. Cocina sana, muchas veces consumida en la misma calle justo después de ser preparada. Aromas y sabores profundos, con un toque refrescante, y preparaciones sencillas pero deliciosas.
Hanoi es conocido por su cultura de comer en la calle. De pie o sentado en una pequeña terraza, el viajero puede degustar deliciosos platos recién cocinados que le sorprenderán. Si quieres hacer una ruta gastronómica o enológica por Vietnam empezar por la capital es una excelente idea para probar platos como Pho, sopa de fideos, Wonton, empanadillas fritas y rollitos de primavera.
El Pho Bo es uno de los platos más conocido de Vietnam, una especie de sopa con noodles cuyo interés radica en que cada cocinero la prepara a su manera y así en cada sitio tiene un toque particular. El Pho Bo de las zonas más turísticas intenta presentar sabores al gusto occidental, pero si el viajero se aleja de esos lugares podrá encontrar a lo largo del país multitud de preparaciones diferentes que le sorprenderán y elegir el que considere mejor. Aquí puedes contar con la ayuda de los agentes locales de Evaneos que hablan español y planifican a medida según tus necesidades.
Los Goi Cuon son los rollitos de verano vietnamitas. Frescos y refrescantes, más ligeros que los conocidos rollitos de primavera, se pueden hacer con casi cualquier cosa y acompañar con múltiples salsas. La isla de Hon Chut es un lugar perfecto para degustar esta delicia desconocida.
Seguramente Hoi An sea la ciudad de Vietnam con una personalidad gastronómica más marcada. Recorrer sus preciosas calles probando aquí y allá las delicias que salen a nuestros ojos es un privilegio que el viajero no puede perderse. Entre las recomendaciones están el Cao Lau (plato de fideos con carne), el Wonton (masa frita con verduras) o las White Rose (raviolis rellenos con gambas).
El clima en Vietnam es muy diferente entre el norte y el sur del país. Como norma general, se puede decir que los meses primaverales son los mejores para viajar, porque presentan temperaturas suaves y pocas precipitaciones. Por eso, ten en cuenta esta época para organizar una ruta gastronómica o enológica por Vietnam. En verano, la parte sur recibe la llegada de los monzones, por lo que no resulta lo más recomendable acudir en esa época. Los meses invernales, por su parte, resultan muy fríos en la zona norte, llegando a tener nieve a cotas muy bajas.
La mejor época para visitar Vietnam es durante la temporada seca, que va de octubre a abril. También hay diferencias climáticas entre el Norte y el Sur del país. Los inviernos son fríos y con niebla en el Norte, mientras que el Sur disfruta de un calor húmedo durante casi todo el año. Por lo tanto, es mejor viajar al Norte entre septiembre y noviembre, cuando las temperaturas son agradables, y visitar el Sur preferiblemente entre diciembre y abril. ¡Descubre una civilización única en un paisaje absolutamente impresionante!