Agosto es el mes más cálido en Islandia, alcanzando la temperatura media en la capital más de 11°C y superando ampliamente los 20°C casi cada día. En la isla de Islandia en agosto las horas de luz son también abundantes y hay muy pocas precipitaciones. Con todo, Islandia tiene un clima cambiante, así que no olvides el impermeable para tu viaje porque te puede sorprender una borrasca furiosa de agua y viento.
La mejor época para viajar a Islandia es durante el verano: las temperaturas son agradables y los días largos con bastante luz. Según las regiones, también puedes ir en mayo y en septiembre, cuando hay menos turistas y el clima sigue siendo agradable, aunque debes tener en cuenta que algunos circuitos o lugares cierran durante estos meses. Entre los meses de octubre y abril, el país está sumido prácticamente en la oscuridad, pero podrás asistir al magnífico espectáculo de las auroras boreales, con un poco más de frío y menos horas de luz, eso sí.