Tamil Nadu es claramente el Estado que más me gusta, la región de la que más enamorado estoy. Permíteme explicarte por qué...
El templo de Madurai
Este es sin duda alguna el templo que más me fascinó de todos los que he visto durante mis viajes por India. Quizás porque fue el primer templo hindú en activo que tuve la oportunidad de ver la primera vez que visité este país. Para mí y para muchos de los que viajan por India, el Sri Meenakshi Templo de Madurai es un lugar único en el mundo.
La ciudad es una auténtica ciudad, tanto de día como de noche, ya que siempre está en constante movimiento. En una efervescencia permanente, estuve horas y días enteros paseando por la ciudad, observando el espectáculo que es la vida aquí, lo incesante que es, sentado en un rincón del templo sin ver el tiempo pasar. Procesiones, ofrendas, rezos en todos los sentidos... Es un encantamiento que te atrapa en todo momento. Algo que no te puedes perder.
La playa de Mahabalipuram
En el corazón de Tamil Nadu, a una hora en coche de la capital de Madras, existe un lugar en calma en el que es obligatorio pasar algunos días, ya sea al comienzo o al final de un viaje por India. Yo tenía por costumbre de pasarme por ahí un fin de semana antes de coger el avión de vuelta a casa en Madras.
La ciudad de Mahabalipuram, originalmente ciudad de pescadores, se ha ido transformando poco a poco en una pequeña estación balneario en la que los habitantes de la capital vienen a pasar el fin de semana o en la que los trotamundos descansan algunos días en la playa.
A pesar de todo, el ambiente es muy agradable y relativamente tranquilo. La playa es tan grande que uno se encuentra con más pescadores y vacas solitarias que con turistas. Hay algunos hoteles no muy caros y restaurantes bastante buenos en los que podrás pasar un rato muy agradable.
Rameshwaram: un secreto muy bien guardado
Para llegar a Rameshwaran, el tren pasa por encima del mar. Es algo increíble. Luego se llega a esta especie de isla maravillosa que alberga un pueblecito y el famoso templo de Rameshwaram, el lugar santo de Tamil Nadu, que también se conoce con el nombre de la Benares del sur.
Tienes que llegar hasta el fin de esta "casi isla", atravesando su increíble lengua de arena de 22 km, que se conoce justamente como "el fin del mundo". Allí podrás bañarte, por un lado, en las aguas tumultuosas del Océano Índico; y, del otro, en la tranquilidad del Mar de Omán y el Golfo de Bengala. Una experiencia única para vivir cuando vas de viaje por India.
Los estudios de cine de Madras
Si visitas Tamil Nadu, es bastante probable que pases por la capital de Madras. Te aconsejo que aproveches la oportunidad para probar la experiencia de ser figurante en una película tamil.
De hecho, Tamil Nadu posee una industria cinematográfica muy importante, cuyos estudios principales están situados en la capital de Madras. Normalmente los equipos de grabación contratan a figurantes de todo el mundo para hacer escenas de sus películas. Te pagarán con comida o en rupias, pero lo importante es que será una experiencia memorable que recordarás para toda la vida.
