Explorando la cultura en Madagascar

Con toda seguridad pasarás por Antananarivo a tu llegada o a tu salida de Madagascar. Esta capital no deja a nadie indiferente y provoca reacciones muy dispares: algunos la adoran y otros la odian. ¡Ya nos dirás cuál es tu opinión tras tu visita!

Un crucero de 4 días a lo largo del río Tsiribihina supone un extraordinario viaje...

¡Una excursión a Nosy Mangabe supone un paréntesis “natural” lleno de belleza. ¡Te sentirás como Robinson Crusoe en esta aventura tropical! A continuación, te doy algunos consejos para que aproveches al máximo esta isla oculta y paradisiaca: una asombrosa fauna y flora, un refugio de piratas y una increíble biodiversidad, ¡este lugar está lleno de sorpresas!

Bastión de los campesinos Betsileo, Ambositra te da la bienvenida en un entorno tranquilo y lleno de recursos, para hacer una parada cultural dedicada al descubrimiento de la artesanía local. Combinación de calidad y destreza, las esculturas Zafimaniry revelan una cultura tradicional, conocida desde los albores de los tiempos...

Ve dirección a Antoetra para sumergirte del modo más auténtico en el mundo rural de las Tierra Altas. Camina a lo largo de una ruta que atraviesa una naturaleza esculpida por verdaderos maestros, los zafimaniry, un poblado de artistas-leñadores. ¡Experimenta además un intercambio cultural con este pueblo extraordinario que sigue perpetuando e incorporando a la vida cotidiana sus tradiciones y creencias ancestrales!

Situado al norte de la isla, el Parque Nacional de Ankarana alberga una formación geológica espectacular: los Tsingys. Una gran cantidad de circuitos turísticos atraviesan el parque, permitiéndote explorar grutas, bosques e inmensas extensiones cubiertas por picos calcáreos formados por la erosión.

Situado al oeste de Madagascar, el Parque Nacional de Bemaraha es uno de los tesoros de la isla. Los Tsingys, esas formaciones cársticas en forma de picos agudos que se pierden en el horizonte, son Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y Patrimonio Cultural Nacional. De difícil acceso, el parque está lleno de sorpresas para los visitantes que deciden aventurarse en él.

Admira el magnífico panorama de la región que ofrece el castillo de Windsor, al noroeste de Diego Suárez. Rodeado por el canal de Mozambique al oeste y la bahía de Antsiranana al este, los franceses construyeron aquí un punto de observación para vigilar los alrededores.

El Paseo de los Baobabs forma parte de los monumentos más fotografiados de Madagascar. Imagínate una línea monumental de baobabs, entre los cuales los más altos miden más de 30 metros y constituyen un hogar para varios cebúes. Uno de los paisajes más bellos de toda la isla.

¿Buscas relacionarte con los lugareños y experiencias insólitas? Entonces, sigue esta guía para descubrir el pueblo de Ampotaka, en la selva del sur de Madagascar. Aquí, los habitantes saben muy bien qué hacer: convertir en depósitos de agua los baobab. Estarán encantados de explicarte cómo funciona, pero un consejo, no pruebes el agua recogida así, ¡corres el riesgo de sufrir el mal del turista!