Bañada por el océano Atlántico y por el océano Índico, el turismo por Sudáfrica se convierte en un mosaico de relieves y paisajes admirables. Un país de diversidad. Visitarás Robben Island, la isla en la que Nelson Mandela estuvo encerrado 18 años durante el Apartheid, y descubrirás al mismo tiempo un país profundamente marcado por su historia. Hay muchísimos lugares que ver en Sudáfrica. Probablemente pasearás por las dunas de Arniston, te asombrarás ante las granjas de avestruces de las carreteras montañosas del pequeño Karoo y acabarás tu excursión en las limpias aguas de los rápidos del Parque Nacional Tsitsikamma. El país es igualmente famoso por la calidad de su vino. Un paseo por la bucólica región de Boland te permitirá degustar los mejores vinos del país, directamente de sus productores. Por último, ¿qué sería de un viaje a Sudáfrica sin un safari por el corazón de las más bellas reservas de animales salvajes? Te envolverá el exotismo de los elefantes, los rinocerontes y los tigres que pueblan la región de Kruger.
Viajar a Sudáfrica es optar por un país variado, salvaje, cosmopolita. Sus parques naturales, la Isla de Robben y Nelson Mandela, la tierra de los vinos... Son todo lugares que no puedes pasar por alto. ¿Sabías que el país tiene tres capitales? ¿Y qué es el séptimo país productor de vino del mundo? Todo esto y muchas más sorpresas te esperan en tu próximo viaje a tierras africanas.
Sudáfrica es un destino que desprende magia e interculturalidad y que va más allá de animales salvajes, tribus o paisajes secos. Te damos unas cuantas recomendaciones sobre lo que ver en Sudáfrica.
Sudáfrica tiene un clima templado, con variaciones locales en función de la altitud y la influencia de corrientes cálidas en el Océano Índico en la costa oeste, y corrientes frías en el Océano Atlántico en la costa oeste. Se caracteriza por dos estaciones principales: la estación seca de abril a octubre, y la lluviosa, de noviembre a marzo. Se pueden hacer viajes a Sudáfrica durante todo el año, aunque es más agradable hacer un recorrido por los parques nacionales en la estación seca. Por el contrario, unas vacaciones en las playas de Ciudad del Cabo serán ideales entre noviembre y marzo.
Sudáfrica ofrece muchas caras, querrás visitar lo más impresionante del país, que está a la altura de cualquier tipo de viaje. Sea un viaje en familia en el que el safari ocupará la mayor parte del tiempo, un viaje de aventureros por las montañas y zonas salvajes, o un viaje romántico y cultural haciendo parada para degustar los vinos de la zona, lo mejor es organizar con tiempo un viaje a medida. Los agentes locales de habla hispana te contarán con todo detalle las mejores rutas y actividades, y te aconsejarán en todo aquello que tengas dudas. Harás un viaje cómodo y con seguridad garantizada. Consulta nuestra guía de información práctica para estar al tanto de todo antes de partir.
Los vuelos a Sudáfrica puedes encontrarlos desde 600 euros con salida directa desde Madrid y Barcelona. El resto de opciones tienen entre una o dos escalas, por lo que es conveniente que mires estos vuelos directos a Sudáfrica con tiempo suficiente.
Para viajar a Sudáfrica es necesario tener el pasaporte en vigor, y que el mismo disponga de, como mínimo, dos páginas en blanco y una fecha de caducidad superior a 30 días posteriores a la fecha de salida del país. No se necesita visado si se viaja de turismo o negocios hasta 90 días, siempre y cuando tengas el pasaporte con las condiciones especificadas anteriormente.
No hay vacunas obligatorias para entrar a Sudáfrica, solo si se procede de zonas endémicas de fiebre amarilla. Sí existen numerosas recomendaciones por parte de la Organización Mundial de la Salud como son la vacuna contra la Hepatitis A y B, fiebre del dengue y Tifoidea. Consulta antes de partir esta información con tu médico de cabecera, así como si es necesario algún tratamiento contra la malaria.
Aunque en general las autoridades del país se esfuerzan en mantener la seguridad y proteger a los turistas, existe un cierto grado de delincuencia. Es importante ser extremadamente precavido con los objetos personales (especialmente la documentación identificativa), evitar ciertas zonas por la noche y sobre todo si se viaja solo, y utilizar los taxis oficiales recomendados por los hoteles. Si vas a alquilar un coche, ¡cuidado con la conducción! Aquí se circula por la izquierda.
África del Sur se caracteriza por dos estaciones: su verano cálido y húmedo (noviembre a marzo) y su invierno seco y más fresco (abril a octubre). Al pertenecer al hemisferio Sur, las temperaturas serán opuestas a las de Europa. La región occidental de Ciudad del Cabo (Western Cape) recibe las lluvias invernales de junio a agosto. Lo mejor: en cada estación, África del Sur tiene algo que ofrecer. De abril a octubre, es la época de los safaris. De noviembre a marzo, las playas son perfectas en el Western Cape. Si vienes de junio a septiembre, tendrás muchas posibilidades de encontrarte con ballenas... Y todavía falta la costa de Kwazulu-Natal, ideal para nadar durante todo el año.
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