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Pingüinos en Boulders, cocodrilos en Isimangaliso o rinocerontes en el parque nacional Kruger, Sudáfrica es un regalo para tu próximo viaje si vas buscando vida natural. Pero también paisajes de naturaleza, y es que Robben Island o la Montaña de la Mesa son espacios naturales con una belleza imponente que se te quedarán grabados en la memoria para siempre. Tampoco puedes perderte la zona de Gansbaai, conocida por la concentración de tiburones blancos que habitan en sus aguas. En definitiva, es el destino ideal para disfrutar de la naturaleza en estado puro.
Hay muchas zonas en todo este país que están completamente protegidas y que se mantienen vírgenes y al margen de la civilización. El parque nacional Kruger es uno de ellos. Al margen de los rinocerontes que lo han hecho famoso, un safari por esta zona permite ver grandes comunidades de leones y otros grandes depredadores.
Otro espacio que hay que incluir en cualquier lista de parajes vírgenes sudafricanos es Addo Elephant Park. Se encuentra cerca de Port Elizabeth, la reserva estaba pensada solo para elefantes, que los hay, aunque hoy también alberga a guepardos, leopardos, leones y a otros muchos animales.
A esta lista hay que sumar el cañón del río Blyde situado entre Johannesburgo y el parque Kruger que antes te mencionamos. Es el único cañón verde del mundo y el tercero más grande del planeta. Sus paisajes son espectaculares, más aún si te acercas en tu visita a las cataratas Lisboa que alcanzan una altura de 95 metros.
Sudáfrica es un destino ideal para ser visitado en pareja o con amigos. En este último tipo de viaje, los safaris en grupo se convertirán en una actividad perfecta para disfrutar de un país que cuenta con una serie de espacios naturales que merecen ser recorridos y compartidos. Pero las parejas también van a encontrar el escenario perfecto para su viaje en muchos rincones del país.
No se puede olvidar que Sudáfrica se encuentra en el hemisferio sur y que su clima tiene algunas peculiaridades que lo separan del resto de la zona. Especialmente, hay que tener en cuenta que las lluvias no son demasiado intensas durante su verano y que las temperaturas no llegan a ser nunca demasiado elevadas. De esta forma, el mejor momento para organizar un viaje natural por Sudáfrica es en los meses de diciembre, enero y febrero cuando se dan unas excelentes condiciones para visitar los espacios naturales del país.
Consulta nuestra guía para saber con más detalle cuando viajar a Sudáfrica.
África del Sur se caracteriza por dos estaciones: su verano cálido y húmedo (noviembre a marzo) y su invierno seco y más fresco (abril a octubre). Al pertenecer al hemisferio Sur, las temperaturas serán opuestas a las de Europa. La región occidental de Ciudad del Cabo (Western Cape) recibe las lluvias invernales de junio a agosto. Lo mejor: en cada estación, África del Sur tiene algo que ofrecer. De abril a octubre, es la época de los safaris. De noviembre a marzo, las playas son perfectas en el Western Cape. Si vienes de junio a septiembre, tendrás muchas posibilidades de encontrarte con ballenas... Y todavía falta la costa de Kwazulu-Natal, ideal para nadar durante todo el año.