8 entornos naturales únicos para descubrir
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Hemos seleccionado 8 magníficos entornos naturales para descubrir con total tranquilidad, lejos de las multitudes de turistas:
Los volcanes de Costa Rica
Reserva Natural De Hoop en Sudáfrica
El desierto de Tolar Grande en Argentina
Erg Chegaga en Marruecos
El lago glaciar Jökulsárlón en Islandia
La península de Dingle en Irlanda
Los increíbles bosques de Namibia
Reserva natural de Río Lagartos en México
Caminar entre los volcanes de Costa Rica
En Costa Rica hay 116 volcanes que representan un auténtico tesoro natural para el país. Algunos de ellos tienen alturas fascinantes, como el volcán Irazú, que se eleva a casi 3450 m. Ponte tus zapatos de montaña y aventúrate a través del paisaje lunar hasta llegar a una zona llana cubierta de arena negra. Espera a que se desvanezca la niebla para ver aparecer de forma mágica el cráter del volcán y el lago de color verde esmeralda escondido en su interior.
Si prefieres asistir a fenómenos volcánicos en zonas aún activas, te recomendamos el Parque Rincón de la Vieja, donde podrás sentir el corazón de la Tierra latiendo y sentir su calor a través de las fumarolas que surgen del suelo. Un espectáculo fascinante.
Descubrir las múltiples facetas de un parque de Sudáfrica
De todos los parques de Sudáfrica, hay uno que logra escapar de las típicas rutas turísticas: la Reserva Natural De Hoop. A sólo tres horas de Ciudad del Cabo, su fauna y flora son un paraíso para los amantes de la biología, ya que siete ecosistemas coexisten en una misma zona. Mira más allá de los arbustos de fynbos (vegetación típica sudafricana) e intenta divisar las dunas de arena dorada que rozan las olas del océano Índico.
Las ballenas australes retozan en alta mar y las cebras y los antílopes pasean por las llanuras. ¡Toda una armonía de contrastes!
Dejarse sorprender por un espectáculo de naturaleza en Argentina
Argentina está llena de fenómenos naturales espectaculares, especialmente a lo largo de las rutas de senderismo que rodean el pueblo de Tolar Grande. Pasea por el Salar Arizaro y divisa la silueta del Cono de Arita (una formación geológica con forma de pirámide) que parece flotar sobre un mar de sal. Aprovecha para contemplar la Cordillera de los Andes, que surge en medio del paisaje como si fuera un planeta lejano.
Y una vez más, déjate deslumbrar por la pureza de las aguas de los Ojos del Mar, cuyo tono turquesa deja ver una profundidad de casi 10 metros, habitada por microorganismos y estromatolitos, testigos milenarios de la vida en la Tierra.
Descubrir los pueblos beduinos en el corazón del desierto de Marruecos
El Chegaga, cerca del pueblo de M'hamid El Ghizlane, es la cuna de los misterios del desierto. Te quedarás sin aliento en medio de este mar de dunas que, en ocasiones, alcanzan más de 500 m de altura. Explóralo en camello o a pie, o visita el pueblo de Bounou: un conjunto de casas de barro cuyos colores se funden con las tonalidades del desierto.
Al amanecer, sube a la cima de una duna para disfrutar de una magnífica vista sobre la inmensidad del desierto. Los rayos de luz deslumbran las colinas arenosas y las colorean en infinitos tonos, desde el rojo ocre hasta el naranja dorado... ¡Una imagen espectacular que quedará grabada en tu memoria para siempre!
Pasearse por las aguas de un lago helado en Islandia
Uno de los paisajes más bonitos de Islandia es sin duda el lago glaciar Jökulsárlón. Sube a bordo de un barco para descubrir los numerosos icebergs que se encuentran en esta laguna. En esta ruta mágica, sólo te acompañará el sonido del hielo deslizándose por el agua. Desde el azul translúcido hasta el azul más intenso, pasando por el amarillo del azufre y el negro de la ceniza volcánica, te sorprenderá la cantidad de tonalidades que pueden adoptar los bloques de hielo.
Tómate un tiempo para pasear por la Playa del Diamante: su arena negra contrasta fuertemente con los icebergs y los rayos del sol la tiñen de rosa al atardecer.
Irse de excursión a la pintoresca costa de Irlanda
Irlanda y sus paisajes salvajes tienen mucho que ofrecer. Las rutas de senderismo te llevarán a llanuras verdes, colinas onduladas y acantilados escarpados que se adentran en el océano. Aquí, la naturaleza es salvaje, virgen. En la Península de Dingle, te recomendamos hacer una parada en Dunmore Head, el cabo más occidental de toda Europa.
Aprovecha la oportunidad de recorrer el Anillo de Kerry: a pie o en bicicleta, este circuito te hará descubrir los paisajes más bonitos de la costa. Y si el mar islandés te fascina, embárcate en una visita a las Islas Blasket: gracias a un guía, descubrirás la vida de antaño en este archipiélago perdido en el fin del mundo.
Maravillarse con los bosques de Namibia y otros lugares de interés geológico
En la región de Damaraland hay muchas formaciones antiguas y el Bosque Petrificado es uno de los ejemplos más fascinantes. Pasea por un mar de arena y troncos fosilizados de más de 100 millones de años de antigüedad y no te pierdas el Spitzkoppe, una formación rocosa de granito de más de 1.700 metros de altura. Durante tu excursión a este lugar te quedarás fascinado por los paisajes y sus tonalidades azules y anaranjadas.
Si quieres ver árboles gigantescos con una forma muy peculiar, diríjate al sur, a los bosques de Quiver Tree o Kokerboom. La altura y la grandeza de estos gigantescos árboles de aloe te impresionarán.
Contemplar un paisaje colorido en México
En Yucatán, la reserva natural de Río Lagartos contiene una rica y variada biodiversidad. Descubre los manglares donde coexisten cocodrilos y aves, creando un ecosistema único. La reserva también alberga la famosa laguna rosa de Las Coloradas: una serie de lagos que deben sus llamativos colores a las algas y al plancton.
Estos tonos cálidos, que contrastan con el azul intenso del cielo y el blanco de los montones de sal que lo rodean, son una maravilla para los amantes de la fotografía que tienen la suerte de visitar el lugar.
Tanto si prefieres los entornos desérticos, los ricos en flora y fauna o los horizontes nórdicos, las agencias locales de Evaneos te acompañarán a descubrir los lugares escondidos y más extraordinarios en las mejores condiciones.