Guía de viajes Filipinas

Si vas de viaje a Filipinas tienes que reservar un día para hacer trekking. Clasificados en el Patrimonio Mundial de la UNESCO, los arrozales de Banaue y de Batad son magníficos. Los trekkings de tres días organizados para descubrir la octava maravilla del mundo forman parte de esos que no se olvidan. Los guías os llevarán a los lugares más cercanos a los arrozales, a veces a través de los mismos. En ocasiones uno se pregunta si no se habrá equivocado de camino, debido a lo insólito de los parajes. La visita os procurará una avalancha de sensaciones fuertes: acercarse a los acantilados y admirar el vacío desde las terrazas, escalar un número incalculable de escaleras vertiginosas, bañarse en las aguas gélidas de las cascadas y, sobre todo, contemplar paisajes tan asombrosos que parecen irreales.

El archipiélago de las islas Bacuit se sitúa en El Nido, en la isla de Palawan. Es un pequeño paraíso salvaje. Es un lugar excepcional para disfrutar de las playas e islas desiertas y chapotear con los peces multicolor. Las puestas de sol son otra de las maravillas de la naturaleza a consumir sin moderación en El Nido. Los colores del cielo cambian constantemente de un momento a otro, ante vuestra mirada estupefacta.

Podéis continuar vuestro periplo hacia el norte de la isla de Palawan, hasta llegar a las islas de Corón o de Cuyo para descubrir todavía más fauna y flora salvajes.

Boracay es un paisaje digno de una postal en el que siempre habéis soñado poder sumergiros. La isla es célebre por sus playas de arena blanca que se lanzan hacia un mar de color turquesa.Recomendada tanto por los habitantes locales como por los turistas, es un lugar ideal para relajarse o para ir de fiesta con los bailarines de fuego por la noche.

Manila es una parada obligatoria en vuestro viaje a Filipinas. Esta ciudad es el epicentro de la vida cultural de Filipinas. Cada barrio tiene su propio ambiente, y cada ambiente es drásticamente diferente del otro. Algunos lugares están llenos de gentío y bullicio mientras otros parecen pertenecer a otro mundo. Algunos lugares os incitarán a consumir, otros, a meditar. ¡Podréis organizar vuestra visita en función de vuestros deseos!

Las Islas Bisayas son un conjunto de islas del centro de Filipinas. En la Isla de Negros podréis nadar con las tortugas de la Isla Apo, cerca de Dumaguete. En Bohol, podréis admirar los tarseros y las Colinas de Chocolate. Los primeros son los primates más pequeños del mundo (¡tan sólo 15 cm sin contar la cola! y las segundas son un conjunto de más de 1200 formaciones geológicas originales en forma de cono. Su nombre proviene del color que adquieren las colinas en otoño. Para terminar, está Cebú, la ciudad que lleva el mismo nombre que la isla. La segunda ciudad más grande de Filipinas después de Manila, donde los lugares para bucear son tan numerosos como espléndidos.