La pronunciación
La pronunciación italiana no es difícil de dominar. Las letras deben pronunciarse una tras la otra. Las vocales se leen como en español.
Existen algunas reglas específicas con respecto a las consonantes. La « c » se dice « k » delante de « a », « o » y « u » ; la « ch » se lee « k » ; la « g » delante de la « e » y la « i » se pronuncia « dj » ; « gli » se dice « lyi » ; la « qu » se lee « kw » como en cual ; la « h » siempre es muda ; la « s » entre dos vocales y delante de algunas consonantes como la « b », « d », « g » se pronuncia « g » ; la « z » entre vocales se lee « ds », en los otros casos « z » se pronuncia « ts ».
No dudes en extender las consonantes dobles (doppie), porque puede variar el significado de una palabra: por ejemplo, pala (pala) / palla (pelota). Puedes practicar con métodos de aprendizaje de idiomas con un CD o tomando un curso en un instituto cultural italiano.

El acento tónico
Otra particularidad del italiano es el acento tónico. A menudo se coloca en la penúltima sílaba, a menos que esté indicado por una tilde en otra letra particular, y en los verbos en la tercera persona del plural: el acento se coloca entonces en la antepenúltima sílaba; y lo mismo sucede con el infinitivo en la mayoría de los verbos terminados en -ere.