
Al principio, estaba el imperio hitita.
De 1800 a 1200 a.C. fue la época del imperio hitita. Después, los griegos y los persas se instalaron en el litoral a partir del siglo VIII a.C. En el año 334 a.C., Alejandro Magno emprende la reconquista de Asia Menor. En el año 31 a.C., la Anatolia se convierte en una provincia romana. En 330, el emperador Constantino trasfiere la capital del imperio a Bizancio, rebautizándola como Constantinopla. El imperio bizantino dura desde 306 hasta 1460.
El siglo XIV marca el comienzo de la supremacía otomana. En 1453, Mehmet II conquista Constantinopla, lo cual marca la caída del imperio bizantino. Constantinopla fue rebautizada como Estambul. Los otomanos emprenden grandes conquistas. Grecia, Albania, Crimea, Cilicia, Siria y Egipto caen en sus manos. El imperio otomano se extiende por numerosos países del Mediterráneo durante el reinado de Solimán el Magnífico, entre 1520 y 1566. En 1699, el imperio otomano abandona Hungría a manos de Austria. El poder se debilitó a partir del siglo XVIII y los jóvenes turcos se rebelan en 1908. Durante la Primera Guerra Mundial, Turquía se alía con Alemania. En 1920, el Tratado de Sèvres decide el reparto del imperio otomano, dejando solo a Turquía Estambul y la Anatolia (imprescindible durante un viaje a Turquía).
En 1922, se abolió el sultanado. Un año más tarde, se proclama la república y Mustafa Kemal Atatürk se convierte en el primer presidente. Atatürk muere en 1938, marcando la historia de Turquía. En 1950, el partido demócrata gana las elecciones. Un año más tarde, Turquía se adhiere a la OTAN. Tuvieron lugar tres golpes de estado: en 1960, en 1971 y en 1980. Los civiles retoman el poder en 1983. Turgut Özal se convierte en Primer Ministro tras las elecciones legislativas. Después, fue elegido Presidente de la República.
En 1994, se lanza el programa de democratización y restructuración del país. El Parlamento aprueba una ley sobre las privatizaciones. En 2002, Turquía adopta numerosas reformas, como la abolición de la pena de muerte en tiempos de paz, para alinearse con las normas europeas. El mismo año, el partido de los islamistas moderados obtiene la mayoría en el Parlamento. Desde entonces, Turquía experimenta una estabilidad política y un gran crecimiento económico.