Paisajes paradisiacos entre mar y montaña.
Aconsejo:
Llévate un buen calzado si quieres apartarte de los turistas.
Mi opinión
Cuando llegues a las playas de Öludeniz (que significa «mar muerto»), deberás elegir si visitar o no las numerosas playas situadas a los pies de las montañas, paradisiacas pero también plagadas de turistas La otra opción es dirigirte hacia la izquierda del mar y escalar la montaña, pero en Öludeniz hace mucho calor, así que te supondrá un pequeño esfuerzo físico. Si eliges la segunda opción, te alejarás de los turistas y descubrirás calitas aisladas y magníficos valles.
Los caminos de montaña de Öludeniz están muy poco frecuentados y son muy agradables de recorrer, ya que estarás en plena naturaleza y, además, siempre tendrás unas vistas magníficas del mar. Descubrirás pequeñas viviendas turcas con jardines muy bien arreglados y te encontrarás con animales domésticos merodeando por la zona. Es una ruta muy tranquila y relajante. Durante esta ruta por la montaña hay dos puntos que no puedes perderte: el valle de Kabak y el famoso valle de las mariposas.
Para llegar a este último, deberás tomar un barco (de pago) en el puerto de Fethiye o bajar a pie por la montaña. El descenso requiere un mínimo de forma física y un buen calzado. Este sitio apartado y paradisiaco es sin duda uno de los más bellos lugares que vi en Turquía.
