Terraza con columnas con vistas al lago de Como

Viajes a Milán y su región

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Aunque a menudo está a la sombra de sus hermanas italianas, descubrirás rápidamente durante un viaje a Milán que es una ciudad donde se vive de lujo. Entre museos de arte contemporáneo, edificios históricos y buenos restaurantes, la capital lombarda posee una elegancia única. Su Duomo, con una altura de 108 metros, no deja a nadie indiferente. Alrededor, se entrelazan callejuelas empedradas que nos llevan al elegante barrio de Brera y a los canales de Navigli.

Corazón palpitante de la moda y el diseño italianos, Milán se vuelve cada vez más cosmopolita y moderna. Durante un viaje a Milán, es en sus barrios populares donde se descubre de una forma más íntima y acogedora. Elevado al rango de arte de vivir, el aperitivo refleja nuestros deseos de un viaje de slow turismo en Milán. Lejos de su imagen de ciudad burguesa, la capital del norte de Italia solo se revela a quienes se toman el tiempo de recorrerla con circuitos a medida, únicos y cien por cien personalizados, fruto del conocimiento profundo y la gran experiencia de nuestras agencias locales.

Nuestras mejores ideas de circuitos a Milán y su región

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Giovanna
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¿Qué ver y qué hacer durante un viaje a Milán y su región?

Moderna sin ser realmente contemporánea, la capital lombarda intriga tanto como fascina. Durante tus vacaciones en Milán, tómate el tiempo necesario para explorar la ciudad y su región. Aquí tienes nuestras recomendaciones para disfrutar de esta ciudad de mil facetas y sus alrededores:

  • Admirar la vista impresionante desde las terrazas del Duomo de Milán
  • Tomar un café bajo la cúpula de vidrio de la Galleria Vittorio Emanuele II
  • Pasear por los grandes almacenes del Quadrilatero d'Oro
  • Asistir a un espectáculo de ópera en el teatro de la Scala
  • Tomar una lección de arquitectura en la piazza Gae Aulenti
  • Visitar un taller de artesanos en el barrio de Brera
  • Pasear por los Navigli de Milán
  • Asistir a un festival de música en Como
  • Pasear en Stresa, a orillas del lago Mayor
  • Visitar, no muy lejos de la ciudad, las islas Borromeas
  • Hacer un recorrido en barco por el lago de Orta
  • Explorar el monte Baldo, Sirmione, Bellagio y el castillo de Vezio
La mejor época para ir.
La mejor época para ir.

¿Cuándo viajar a Milán y su región?

El verano es seguramente la época ideal para explorar Milán y su región bajo el sol, con temperaturas máximas que varían entre los 25 y los 30 grados.

Para los amantes de los deportes de invierno, el termómetro puede descender por debajo de cero entre diciembre y febrero, ofreciendo condiciones perfectas para aventuras nevadas.

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Las opiniones de los viajeros tras su viaje a Milán y su región

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Lago di Garda y alrededores, un viaje en familia fantástico.
5
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Viajes a Milán y su región en 2025: preguntas frecuentes

Para visitar los sitios imprescindibles de Milán como el Duomo, la galería Víctor Manuel II o el castillo de Sforza, se recomienda como mínimo un fin de semana largo. Con un circuito de una semana en Milán, puedes tomarte el tiempo para pasear lejos de las multitudes. Con más tiempo y calma, también podrás explorar zonas como el lago de Como, los Dolomitas o Piamonte.

Unas vacaciones en Milán siempre se desarrollan en un entorno de hermosa arquitectura, arte y cultura. Para sumergirte en la historia milanesa, explora para empezar el centro histórico: el Duomo, el Corso Vittorio Emanuele II y el barrio de la moda. Luego dirígete al barrio moderno de Milán, con una parada en la plaza Gae Aulenti. Los días siguientes, pasea por el barrio de Brera, la Via Fiori Chiari o los Navigli.
Desde Milán, el itinerario continúa en coche o en tren a las orillas del lago Mayor. Stresa, una localidad que es una verdadera postal, es un punto de partida para explorar las islas Borromeas. En los alrededores, pasea por Orta San Giulio, Arona o en la romántica ciudad de Mergozzo.

Los vuelos directos representan la opción más rápida para llegar a Milán, con una duración aproximada de dos horas desde Madrid o Barcelona. Los principales aeropuertos de destino son Milán-Malpensa y Milán-Linate, conectados al centro mediante trenes y autobuses regulares.
Para los viajeros que prefieren el transporte terrestre, los autobuses nocturnos parten desde varias ciudades españolas hacia la estación de Lampugnano en Milán. El trayecto dura entre 14 y 22 horas, dependiendo del punto de partida.
La ruta en tren requiere transbordo en Francia, con una duración total de 12 horas desde Barcelona. Los trenes salen de la estación Barcelona-Sants y llegan a Milano Centrale, ubicada en el corazón de la ciudad.

Una estancia de tres o cuatro días en Milán permite descubrir los sitios imprescindibles de la capital lombarda. Buena noticia: Milán es una ciudad que se presta a la movilidad terrestre. En bicicleta o en transporte público, descubre el Duomo de Milán o el barrio de la moda. Pero para visitar Milán en modo slow turismo, opta por un circuito de una semana.
Después de un fin de semana en la capital, deja el centro de la ciudad y tómate el tiempo para descubrir los tesoros de la región. Stresa y Orta San Giulio, las joyas del lago Mayor, las islas Borromeas... Para un viaje sostenible a Milán, opta por una estancia más larga y explora sus alrededores en tren o en autobús.

Para un viaje más económico y responsable, opta por un trayecto en tren. Para los alojamientos, los precios de los hoteles en Milán varían mucho según la categoría y el barrio. En cuanto a las comidas, puedes probar las especialidades de la cocina milanesa a buen precio. También hay que tener en cuenta el coste de las visitas turísticas. En el lugar, prioriza el transporte público, de hecho, tendrás a tu disposición abonos de transportes. Para tener una idea del presupuesto, organiza un circuito a tu medida junto a nuestras agencias locales.

Durante una estancia en Milán, la mayoría de los viajeros eligen alojarse en el elegante y artístico barrio de Brera o cerca del Duomo. El barrio de los Navigli es apreciado por su ambiente animado y bohemio, con sus bonitos canales, bares y restaurantes animados. Menos concurrido, Isola, el barrio bohemio de la ciudad, ofrece un pequeño oasis de paz con ambiente de pueblo.
Alojarse en el centro histórico es una buena opción para visitar los lugares imprescindibles de Milán, quedando así casi todos ellos cerca de tu alojamiento. Para disfrutar de la capital de la moda, alójate en el Corso Como o en el sector de la Porta Garibaldi. Allí encontrarás muchos bares, restaurantes, comercios y sobre todo una vida animada de día y de noche.

Durante un circuito en Milán, se puede llegar fácilmente al hermoso lago de Como, a solo 50 kilómetros al norte de la ciudad. En menos de una hora, se conecta la estación de Como San Giovanni desde la estación de Milán Centrale o desde la estación de Milán Porta Garibaldi. Con salidas cada 30 minutos, el tren es una buena idea para tomar aire en las orillas del lago de Como. Otra opción es el coche de alquiler.
Desde Milán, se puede prolongar fácilmente el viaje hasta los grandes lagos. Bellagio y sus magníficas vistas, Lecco y su espectacular paisaje, Varenna y su atmósfera tranquila... En ferry, en coche o en bicicleta, se llega a estos pintorescos pueblos desde Como.

Entre paseos urbanos, museos para niños y direcciones gourmet, Milán es una escapada agradable para unas vacaciones con niños organizada a vuestra medida, que es siempre la mejor manera. Las actividades que no te puedes perder:
- Encontrarse con las gárgolas en los techos del Duomo
- Jugar a los caballeros en la fortaleza de los Sforza
- Dejarse fascinar por algunos de sus sitios religiosos, como la catedral de Milán, la basílica de San Ambrosio o la iglesia de Santa Maria delle Grazie
- Aprender las técnicas de Leonardo da Vinci en el Museo de Ciencias
- Probar un delicioso risotto o alguna otra especialidad en una trattoria de la ciudad
- Comer un helado en la galería Vittorio Emanuele II, con su increíble bóveda de vidrio y sus arcadas perpendiculares cubiertas
- Visitar lagos italianos como el lago de Como
- Admirar el arte callejero milanés cerca de los canales de Navigli
- Descifrar las obras de arte de la pinacoteca de Brera
- Recorrer la ciudad de Milán en un tranvía histórico
- Jugar en los prados del parque Sempione y su contiguo castillo Sforzesco