Portland es una de mis regiones preferidas de Jamaica. Primero, porque no es demasiado turística, al contrario que las ciudades con hoteles-club que se extienden desde Negril hasta Ocho Ríos y que privatizan las playas para sus clientes. Allí no hay presiones, las relaciones con los habitantes son más naturales y nadie intentará venderte objetos que no quieres.
Me gustó mucho Puerto Antonio, la ciudad principal, pero aún más la zona salvaje que se prolonga hacia el este. En primer lugar, están Boston Bay y la magnífica playa de Winnifred Beach, gratuita, enorme, frecuentada por habitantes locales y con unos puestos de pescado a la parilla delicioso. Tendrás un ambiente puramente jamaicano garantizado. Lo mismo digo de la playa central de Boston Bay, donde incluso podrás ver a algunos surfistas locales. Sin embargo, en esa zona también hay sitios muy turísticos que son magníficos, como el Blue Hole (un impresionante lago de aguas de color azul turquesa) y la playa de Frenchman's Cove (que cuesta 10 $ por persona).
En la intersección con la carretera principal, se encuentra el mejor jerk chicken de la isla, en los jerk centers que compiten entre sí. También venden pescado a la parrilla y, sobre todo, langosta. Sin embargo, presta atención a los precios. Hay que negociarlos bien antes (calcula no pagar más de 12.000 dólares jamaicanos) y es mejor ir a mediodía porque por la tarde ya no queda nada. Un poco más allá, las playas de Fair Prospect y Long Bay están totalmente desiertas y son mágicas, con sus selvas de cocoteros salvajes.