El Concepción es el más grande de los dos volcanes que componen la encantadora isla de Ometepe ubicada en el lago Nicaragua. Al contrario que Maderas, este estratovolcán sigue activo y su última erupción es relativamente reciente, ya que ocurrió en el 2010. Es además distinto de su vecino pues se encuentra totalmente pelado y presenta una pequeña nube de azufre en la cumbre.
El ascenso a este volcán es especialmente difícil ya que culmina a 1.700 metros. Tanto la subida como el descenso son pruebas para las que hay que estar preparado. De media, los más aventureros realizarán toda la caminata en unas 8-9 horas, y es obligatorio ir acompañado de guía. Aunque el paisaje es espectacular, y seguramente tendrás la oportunidad de cruzarte con monos o pájaros, imprescindibles en tu recorrido por Nicaragua.
¡Ah! Concepción... desde el momento en el que la vi en la distancia desde el barco que unía San Jorge con Ometepe, sólo tenía un deseo: hacer el ascenso. Así que me lancé con un guía el día siguiente a las 5h30 de la mañana. La primera parte de la caminata hasta el Mirador se hace por el bosque (calcula alrededor de 1h30), y es la oportunidad de descubrir una fauna muy rica (monos aulladores, monos de cara blanca, pájaros emblemáticos de Nicaragua). La llegada al Mirador es impresionante, y te permite disfrutar del paisaje de la isla Omepete y el lago Nicaragua.
A partir del Mirador, la subida continúa por un terreno rocoso y empinado y se vuelve un poco más dura. Las rocas volcánicas se van erosionando en cada paso que damos. Es difícil encontrar el equilibrio, especialmente cuando hemos llegado, el viento era tan fuerte que a veces nos hacía caer.
Tras 2 horas de subida, llegamos a la cima del volcán Concepción, cubierta de niebla, así que fue imposible ver el cráter, ni nada que estuviese más allá de diez metros. Sin embargo disfrutamos de las vistas claras durante el descenso.
Si bien la subida era bastante difícil, el descenso me pareció interminable, tuve la sensación de que mis piernas no tenían energía para seguir caminando.
De todas formas guardo un buen recuerdo de esta hermosa caminata, a pesar de que tuve algunos dolores por varios días. No te lo puedes perder si eres un amante de las caminatas.